COVID-19FeaturedHealthHuman InterestNewsPoliticsSocial Issues

“Unfathomable”: U.S. Death Toll from Coronavirus Hits 200,000

Muertes por coronavirus en EE.UU. superan las 200.000

 

The U.S. death toll from the coronavirus topped 200,000 on Tuesday, September 22, by far the highest in the world, hitting the once-unimaginable threshold six weeks before an election that is certain to be a referendum in part on President Donald Trump’s handling of the crisis.

“It is completely unfathomable that we’ve reached this point,” said Jennifer Nuzzo, a Johns Hopkins University public health researcher, eight months after the scourge first reached the world’s richest nation, with its state-of-the-art laboratories, top-flight scientists and stockpiles of medical supplies.

The number of dead is equivalent to a 9/11 attack every day for 67 days. It is roughly equal to the population of Salt Lake City or Huntsville, Alabama.

And it is still climbing. Deaths are running at close to 770 a day on average, and a widely cited model from the University of Washington predicts the U.S. toll will double to 400,000 by the end of the year as schools and colleges reopen and cold weather sets in. A vaccine is unlikely to become widely available until 2021.

“The idea of 200,000 deaths is really very sobering, in some respects stunning,” Dr. Anthony Fauci, the government’s top infectious-disease expert, said on CNN.

The bleak milestone was reported by Johns Hopkins, based on figures supplied by state health authorities. But the real toll is thought to be much higher, in part because many COVID-19 deaths were probably ascribed to other causes, especially early on, before widespread testing.

Trump said it was “a shame” the U.S. reached that number but argued the toll could have been much worse.

“I think if we didn’t do it properly and do it right, you’d have 2.5 million deaths,” Trump told reporters at the White House before leaving for a campaign rally in Pittsburgh. He added that the United States is now “doing well” and “the stock market is up.”

He also gave his often-repeated broadside that China was at fault for the pandemic. In a prerecorded speech to the U.N. General Assembly, he demanded that Beijing be held accountable for having “unleashed this plague onto the world.” China’s ambassador rejected the accusations as baseless.

On Twitter, Democratic presidential candidate Joe Biden said, “It didn’t have to be this bad.”

“It’s a staggering number that’s hard to wrap your head around,” he said. “There’s a devastating human toll to this pandemic — and we can’t forget that.”

For five months, America has led the world by far in sheer numbers of confirmed infections — nearly 6.9 million as of Tuesday — and deaths. The U.S. has less than 5% of the globe’s population but more than 20% of the reported deaths.

Brazil is No. 2 with about 137,000 deaths, followed by India with approximately 89,000 and Mexico with around 74,000. Only 10 countries rank higher in COVID-19 deaths per capita.

“All the world’s leaders took the same test, and some have succeeded and some have failed,” said Dr. Cedric Dark, an emergency physician at Baylor College of Medicine in hard-hit Houston. “In the case of our country, we failed miserably.”

Black and Hispanic people and American Indians have accounted for a disproportionate share of the deaths, underscoring the economic and health care disparities in the U.S.

Worldwide, the virus has infected more than 31 million people and is closing in fast on 1 million deaths, by Johns Hopkins’ count, though the real numbers are believed to be higher because of gaps in testing and reporting.

 

The Associated Press

In this May 28, 2020, file photo, a woman passes a fence outside Brooklyn’s Green-Wood Cemetery adorned with tributes to victims of COVID-19 in New York. The U.S. death toll from the coronavirus topped 200,000 Tuesday, Sept. 22, a figure unimaginable eight months ago when the scourge first reached the world’s richest nation with its sparkling laboratories, top-flight scientists and towering stockpiles of medicines and emergency supplies. (AP Photo/Mark Lennihan, File)

SPANISH:

 

 

La cifra de muertes a causa del coronavirus en Estados Unidos superó el martes, 22 de septiembre, las 200.000 –por mucho, la mayor cantidad en el mundo–, alcanzando un umbral que parecía inimaginable cuando faltan seis semanas para las elecciones presidenciales, las cuales seguramente serán en parte un referendo sobre el manejo que el presidente Donald Trump ha dado a la crisis.

“Es completamente incomprensible que hayamos llegado a este punto”, dijo Jennifer Nuzzo, investigadora de salud pública de la Universidad Johns Hopkins, ocho meses después de que el virus llegara a la nación más rica del mundo, con sus laboratorios de última generación, científicos de primer nivel y reservas de suministros médicos.

El número de muertos es equivalente a que ocurriera un atentado como el del 11 de septiembre del 2001 a diario, durante 67 días. Es aproximadamente la misma población que tiene Salt Lake City o Huntsville, Alabama.

Y aún sigue subiendo. Las muertes rondan las 770 por día en promedio, y un modelo de la Universidad de Washington predice que el número total de víctimas en Estados Unidos llegará a 400.000 para fin de año, a medida que las escuelas vuelvan a abrir y llegue el invierno al hemisferio norte. Además, es poco probable que haya una vacuna disponible antes del 2021.

“La idea de 200.000 muertes es realmente muy aleccionadora, y en algunos aspectos impresionante”, dijo a CNN el Dr. Anthony Fauci, el principal experto en enfermedades infecciosas del gobierno.

El sombrío umbral fue reportado por la Universidad Johns Hopkins con base en las cifras proporcionadas por las autoridades de salud estatales. Pero se cree que la cifra real es mucho mayor, en parte debido a que muchos decesos por COVID-19 fueron atribuidos a otras causas, sobre todo al principio de la pandemia, antes de que se realizaran pruebas de manera generalizada.

Trump dijo que era una “lástima” que Estados Unidos alcanzara esa cifra, pero alegó que pudo haber sido mucho peor.

“Creo que si no lo hubiéramos hecho de manera apropiada y correcta, tendríamos 2,5 millones de muertes”, comentó Trump a los reporteros en la Casa Blanca antes de viajar a Pittsburgh para un evento de campaña. Añadió que a Estados Unidos le “está yendo bien” y que “el mercado de valores está en alza”.

También reiteró su argumento de que China era el responsable de la pandemia. En un discurso grabado para la Asamblea General de la ONU, exigió que se llame a cuentas a Beijing por haber “liberado esta plaga al mundo”. El embajador de China rechazó las acusaciones y dijo que no tenían fundamento.

En Twitter, el candidato demócrata a la presidencia, Joe Biden, dijo que “no tenía que haber sido tan malo”.

“Es un número alarmante que es difícil de meter en la cabeza”, comentó. “Hay un costo humano devastador por esta pandemia y no podemos olvidar eso”.

Durante cinco meses, Estados Unidos ha liderado el mundo en casos confirmados de coronavirus, con casi 6,9 millones hasta el martes, y en decesos a causa de la enfermedad. Estados Unidos tiene menos del 5% de la población del mundo, pero más del 20% de las muertes que se han reportado.

Brasil ocupa el segundo lugar en la lista de países con más muertes, con alrededor de 137.000, seguido de la India con aproximadamente 89.000 y de México con alrededor de 74.000. Sólo cinco países —Perú, Bolivia, Chile, España y Brasil— ocupan un lugar más alto en las muertes per cápita por COVID-19.

“Todos los líderes mundiales enfrentaron la misma prueba, y algunos han tenido éxito y otros han fracasado”, señaló el Dr. Cedric Dark, médico de urgencias en el Colegio de Medicina de Baylor en la ciudad de Houston. “En el caso de nuestro país, fracasamos miserablemente”.

Las personas hispanas y de raza negra, así como los indígenas estadounidenses, han representado una parte desproporcionada de las muertes, lo que pone de manifiesto la disparidad económica y de atención médica en Estados Unidos.

En todo el mundo, el virus ha infectado a más de 31 millones de personas y se acerca rápidamente al millón de muertes, con casi 967.000 vidas que se han perdido, según el recuento de la UJH, aunque se cree que las cifras reales son mucho más altas debido a las brechas en las pruebas y los informes.

 

The Associated Press

Related Articles

Back to top button