Arts & EntertainmentCollaboratorsMid-SouthVania Barraza Toledo

Recomendaciones de cine hispano: Como agua para chocolate (1992)

 

Recommendations for Latin American Films: Like Water for Chocolate (1992)

 

Por Vania Barraza Toledo

Profesora de español en la Universidad de Memphis

 

Este ya clásico largometraje, de la cinematografía latinoamericana, es un notable ejemplo de realismo mágico llevado, con éxito, a la pantalla grande. La película, dirigida por Alfonso Arau, gira en torno a Tita de la Garza (Lumi Cavazos), la hija menor de una familia mexicana que se encuentra destinada a cuidar de su madre hasta la muerte de su progenitora. Como es de esperar, el conflicto surge cuando Tita se enamora del joven Pedro Muzquiz (Marco Leonardi), a quien se le niega la mano de la muchacha debido a la tradición familiar. A fin de estar cerca de su enamorada, Pedro acepta casarse con Rosaura (Yareli Arizmendi) la primogénita de las hermanas.

Tita tiene un vínculo especial con la cocina. Toda su vida, ella ha estado conectada a la comida. Su encanto radica en poder transmitir sentimientos y emociones a través de los platillos que prepara con esmero y dedicación. En este sentido, la protagonista encarna el prototipo de mujer que nutre, protege y cuida de los demás. Al mismo tiempo, su relación con el arte culinario le provee una autonomía e independencia que le permiten realizarse como persona.

Por esto, y a pesar de las constricciones sociales que experimenta, Tita consigue una libertad en la cocina – un espacio doméstico asociado, por lo común, con la represión femenina – de manera que ella logra sobreponerse a la coerción cultural que experimenta como mujer. Por este motivo, a través de sus platillos, Tita se transforma en una figura poderosa que consigue influir en la vida de los otros.

A la vez, Como agua para chocolate permite comprender en términos visuales el estilo narrativo del realismo mágico. Esta tendencia literaria, que se popularizó entre los escritores de los años 60, se caracteriza por la exageración, transmitir una idiosincrasia y representar elementos sobrenaturales, aceptados como parte de una cotidianidad por los personajes. En todo caso, es una lástima que, en esta adaptación de la novela homónima de Laura Esquivel, Tita tenga que renunciar al amor y a la maternidad debido a una arbitraria costumbre mantenida dentro de su hogar.

 

ENGLISH:

 

This Latin American feature film – today a classic – is a remarkable example of magical realism successfully conveyed onto the big screen. The movie, by Alfonso Arau, revolves around Tita de la Garza (Lumi Cavazos), the youngest daughter of a Mexican family who is expected to take care of her mother until the death of the matriarch. As expected, the conflict arises when Tita falls in love with the young Pedro Muzquiz (Marco Leonardi), who is denied the girl´s hand due to the family tradition. In order to be close to his beloved Tita, Pedro agrees to marry Rosaura (Yareli Arizmendi), the eldest of the sisters in the house.

Tita has a special connection with food. All her life, she has been connected to the kitchen. She is able to communicate her feelings and emotions through the dishes. In this sense, the protagonist incarnates the prototype of a woman who nurtures, protects and cares for others. At the same time, her relationship with the cuisine provides her with an autonomy and independence.

Consequently, and despite the social constrictions she experiences, Tita achieves freedom in the kitchen – a domestic space usually associated with female repression – so that she is able to overcome the cultural coercion she experiences as a woman. For this reason, Tita becomes a powerful figure that succeeds in influencing the lives of others with her plates.

Like Water for Chocolate allows viewers to understand in visual terms the literary style of magical realism. This literary movement, popularized among the writers of the 60s, is known for exaggerating, conveying a local idiosyncrasy and representing supernatural elements, accepted as part of a daily life by the characters. In any case, it is a pity that in this adaptation of the novel by Laura Esquivel, Tita has to renounce love and motherhood due to an arbitrary custom kept inside her home.

 

 

Related Articles

Back to top button